The thing that should not be (Parte III):

Bueno, pues finalmente he regresado de mis vacaciones, de mi intercambio en Inglaterra y de mi propio mundo de fantasía. Y he regresado al instituto, cómo no. Lo cual quiere decir que cada vez hay menos tiempo libre para poder dedicarse a lo que uno se dedica normalmente en verano (en mi caso, al menos): a jugar al rol y a escribir cosas nuevas.

El inicio del curso marca también la apertura de la Temporada Histórica del Sacrae Domus, como todos los años, así que me gustaría publicar algo íntegramente mío al menos hasta dentro de un tiempo. En este caso, dedicarles un pequeño homenaje a todos mis compañeros de rol, tanto nuestro máster como sus jugadores, como los míos propios. He ido recopilando una serie de «Grandes Momentos», como se referiría a ellos Arathion, que me gustaría incluir en la misma categoría de los microrrelatos del verano anterior.

♥ The thing that should not be (Parte I)

♥ The thing that should not be (Parte II)

Parte I

Sutilezas (aunque ya fue publicada con anterioridad, me gustaría recogerla en la compilación)

-Venenosa.

-¿Yo? Qué va, si soy un algodón de azúcar andante…

-Y untado en arsénico…

Arathion y Lady Nerón, durante una conversación perfectamente normal.

Parte II

Dark Heresy

-Quiero tirar fortaleza…

-¿Fortaleza?

-Sí. Quiero saber cuántos minutos puedo contener la respiración para pasar a través de esta puerta.

Mir (jugador) a Lady Nerón (máster), en presencia de Ishmael, Draken, Xanthia y Cimbria.

Parte III

Star Wars

NK-Sentir vida… (tirada de dados)

M(áster)-Sientes vida.

S-¡¡¡Vida al otro lado de la puerta!!! ¡¡¡La derribo de un puñetazo!!!

M-Hay plantitas…

Neil Kartigan, Seiren (jugadores) y Arathion (máster), presenciado por Mina.

Parte IV

Dungeons and Dragons (D&D)

-¡¿Esa cosa es humanaaa?!

Vran Gwenn (Lady Nerón) a Arathion (máster), refiriéndose a un vampiro.

Parte V

Mentes criminales

-Eh, que, aunque no lo parezca, sé distinguir un lavavajillas de una lavadora…

-…

-Sí, mujer, la lavadora es ese aparato que tiene una ventanita en el centro para poder espiar a la ropa mientras se baña…

1lisiado a Lady Nerón, durante una segunda conversación perfectamente normal.

Todos tenemos cabida en el Diccionario del Diablo:

Sé que llevaba demasiado tiempo esto sin ninguna entrada decente, pero, como el calor me da sueño, pues no he preparado aún nada de ningún tema histórico, por lo que quiero dejar aquí algo un poco diferente para animar el blog.

En parte lo hago como agradecimiento por todo este tiempo que lleváis siguiendo mi blog.

Nota antes de la lectura: si alguno no está conforme con la definición que le he asignado (lo he hecho como simple diversión, no es ninguna ofensa) o, en el caso de que me haya olvidado de alguien, por favor, comentario >.<u

(Ambrose Bierce, el autor del célebre «Diccionario del Diablo»)


Metalsaurio; caimán – cocodrilo de América, superior, en todo, al cocodrilo de las decadentes monarquías del Viejo Mundo. Herodoto dice que, el Indus es, con una excepción, el único río que produce cocodrilos; estos, sin embargo, parecen haberse trasladado al Oeste, y haber crecido con los otros ríos.

1lisiado; cínico miserable cuya defectuosa vista le hace ver las cosas como son y no como debieran ser. Los escitas acostumbraban a arrancar los ojos a los cínicos para mejorarles la visión.

Apreciador; día – período de veinticuatro horas en su mayor parte desperdiciado. Se divide en el día propiamente dicho y la noche o día impropiamente dicho; el primero se consagra a los pecados financieros y la segunda a los otros pecados. Estas dos clases de actividad social se complementan.

Reaper Shadow; elocuencia – arte oral de persuadir a los tontos de que lo blanco es blanco. Incluye el don de hacer creer que cualquier color es blanco.

Isone de Hasgar; esotérico – abstruso en forma muy particular, y consumadamente oculto. Las filosofías antiguas eran de dos clases: «exotéricas», o sea aquellas que los propios filósofos podían comprender en parte; y «esotéricas», o sea las que nadie podía comprender. Estas últimas som las que han afectado más profundamente el pensamiento moderno y las que han tenido mayor aceptación en nuestro tiempo.

Sayuri; gato – autómata blando e indestructible que nos da la naturaleza para que lo pateemos cuando las cosas andan mal en el círculo doméstico.

Kalan; Historia – relato casi siempre falso de hechos casi siempre nimios producidos por gobernantes casi siempre pillos o por militares casi siempre necios.

Ker y Xai; imaginación – depósito de mercaderías que poseen en común los poetas y los mentirosos.

Lady Nerón; loco – dícese de quien está afectado de un alto nivel de independencia intelectual; del que no se conforma a las normas de pensamiento, lenguaje y acción que los conformantes han establecido observándose a sí mismos; del que no está de acuerdo con la mayoría; en suma, de todo lo que es inusitado. (…)

The Blind y The Reaper; novela fantástica – obra de ficción que no rinde pleitesía al Dios de las Cosas que Son. En la novela, el pensamiento de escritor está atado a la verosimilitud, como un caballo al palenque, pero en la novela fantástica se pasea a voluntad por todo el reino de la imaginación, libre, sin ley, sin rienda ni freno (…)

Loen; tinta – innoble compuesto de tanogalato de hierro, goma arábiga y agua, que se usa principalmente para facilitar la propagación de la idiotez y promover el crimen intelectual. Las cualidades de la tinta son peculiares: puede emplearse para hacer reputaciones y para deshacerlas; blanquearlas y ennegrecerlas; pero su aplicación más común y aceptada es a modo de cemento para unir las piedras en el edificio de la fama, y de agua de cal para esconder la miserable calidad del material (…)

La Cámara de los Días (Parte I):

Acto I

Un futuro escrito


Vraël, el Señor del Templo de Asuryan, el Guardián de la Llama Eterna, posó suavemente las manos sobre las cálidas paredes de piedra oscura, sintiendo en las palmas el fuego ardiente de la Palabra; las letras grabadas con el Fuego Sagrado del Fénix se le clavaban en la piel como afiladas estacas, pero aún así, no apartó las manos. Una solitaria lágrima se escurrió por sus mejillas pálidas y demacradas por el paso del Tiempo y la pena que le consumía interiormente, evaporándose rápidamente debido al vapor que emanaba la pared de la sala, sin dejar rastro, como si nunca hubiese existido.

Sus ojos violáceos se posaron sobre las palabras que tenía escritas enfrente, sobre el techo grabado y las piedras que pisaba. Runas, palabras incandescentes escritas con el Fuego Indeleble; la Tinta del Fénix se escurría por las piedras como regueros de sangre incendiada.

Las altas paredes de la Cámara de los Días le producían una aborrecible sensación de soledad y desasosiego, y sintió como se le cerraba la boca del estómago. Estaba solo, pero sentía como si un millar de ojos se clavasen en su espalda y le penetrasen hasta las entrañas. Apoyó el rostro contra la pared, dejándose caer en el suelo mientras las lágrimas se escurrían por su rostro. Se sintió cien años más viejo y mil veces maldito y desdichado. Su propia raza estaba maldita.

Aenarion estaba en peligro; todos los Elfos lo estaban. Las Llamas de Asuryan crepitaron en la penumbra, sobre el altar sagrado del Templo, iluminándolo todo con su característico resplandor anaranjado y tenue, suave, que en aquel momento le pareció aterrador, como los mismos fuegos de la Disformidad. Vraël no pudo más que encomendarse al dios, rezando por la salvación de Ulthuan y deseando en lo más profundo de su ser no haber hecho nunca aquel voto de silencio que le convertía en un Guardia del Fénix, ese voto que le hacía mantener la más impasible impunidad ante el destino del Mundo escrito en las paredes ardientes con la sangre del Fénix.

Hacía mucho tiempo que ella había muerto, pero Aenarion la recordaba dolorosamente a diario, más de lo necesario, en opinión de Morathi. Sus cabellos de oro, su piel inmaculada y luminosa y sus ojos del color de las amapolas primaverales. La Reina Eterna. La que fue asesinada por los malditos revolucionarios adoradores del Cuervo y de la Disformidad. En su interior sabía que la venganza que se había cobrado no era suficiente para sanar la sed de venganza que desde entonces le invadía cada vez que tenía noticia de una nueva guerrilla en las costas de Ulthuan.

Se sacudió los recuerdos de la memoria como si fuesen pájaros molestos y se volvió hacia su nueva concubina, tumbada sobre el lecho, blanca y a la vez oscuramente perversa y hermosa. El cabello le caía sobre el rostro como una cascada de rizos azabaches. A través de los párpados cerrados, pudo imaginar sus ojos violetas y ardientes, vivaces y a la vez siniestros y oscuros, como dos pozos abiertos sobre su bello rostro de facciones perfectas. Le acarició los pómulos y salió presto del dormitorio, dejándola allí, sumida en sus inmortales sueños.

Una vez en el largo corredor que daba al patio interior de la vivienda, se apoyó en la fría pared de mármol, sujetando con fuerza el pomo de la espada y sintiéndose desvanecer. De repente se sintió agotado, como si llevase años luchando contra las depravadas fuerzas del Caos y los numerosos e insanos adoradores del Príncipe Negro que pululaban por las catacumbas de la ciudad, corrompiendo la belleza élfica con sus orgiásticos rituales a Slaanesh.

Como Rey Fénix y Conservador de la Llama Sagrada, le correspondía a él darles caza e imponer su castigo.

Unos gritos lo despertaron bruscamente del trance en el que estaba sumido, haciendo que todos los músculos de su cuerpo se tensasen dolorosamente.

-¡Vamos, plebeyo, atrévete a retarme!-la voz siniestra y amenazante de su joven hijo, fruto de su relación con la bella Morathi, se alzó con orgullo.

Aenarion se apresuró a asomarse al patio, manteniéndose oculto entre las sombras que proyectaba una de las múltiples columnas. Un joven muchacho llamado Imrik sostenía frente a su hijo una buena espada, seguramente robada de alguna forja, en posición amenazante, con los ojos entrecerrados y convertidos en una fina ranura que destilaba odio. Su hijo, en cambio, se mantenía sereno pero alerta, con la cabeza bien alta y lanzándole una mirada de desprecio a su oponente. Sus cabellos oscuros ondeaban debido a la suave brisa que soplaba en el patio, y sus ojos pálidos, casi traslúcidos, brillaban divertidos.

Imrik se abalanzó sobre el muchacho, pero éste detuvo su estocada con una delicada finta.

Aenarion, orgulloso de su hijo y dejándose llevar por la febril locura del combate, permaneció en las sombras, disfrutando con cada instante de la pequeña batalla, mientras su hijo se exhibía frente al joven Imrik en una victoria clara. Cuando por fin logró desarmarlo, y ya se proponía matarlo, Aenarion reaccionó.

-¡Ya es suficiente, Malekith!-y su potente voz no dejaba lugar a réplicas.

Malekith apartó la delgada y afilada hoja del cuello del sudoroso muchacho y enfundó de nuevo el arma. Luego, sin apenas dirigirle una mirada a su padre, desapareció entre las sombras del corredor, en dirección desconocida. Aenarion le siguió con la mirada, y, cuando se volvió para dedicarle su atención al joven

Imrik, descubrió, muy a su pesar, que éste también había desaparecido.

… Y por fin sus ojos se posaron sobre una breve frase escrita casi al ras del suelo, en pequeñas runas de fuego debido a la falta de espacio. Sus dedos recorrieron con delicadeza, casi con amor, las palabras escritas.

… Cuando las llamas se alcen de nuevo al segundo Rey después del Sagrado Aenarion, y la sombra haya perecido y sea desterrada a los abismos, la esperanza resurgirá bajo la figura de Caledor.

Vraël sonrió. Quizá, después de todo, la causa no estaba perdida.

The thing that should not be (Parte II):

Comienza el mes de septiembre, y con ello el instituto… un nuevo curso, nuevos libros, nuevos profesores y demás parafernalia estudiantil. Con el mes de septiembre se inicia también la nueva Temporada Histórica del Sacrae Domus, pero, como aún no tengo preparado el próximo post histórico (empezaremos fuerte, sin duda), he decidido hacerle un homenaje a mi hermanito pequeño (diez años), que, como yo, y a la misma edad que comencé yo, ha empezado a escribir pequeñas historias divertidas e inocentes.

Parte I

Descripción de un ordenador

Hay dos tipos de ordenador: portátiles y los que tienen una pantalla, un teclado y un ratón conectado a una CPU o torre. Los portátiles tienen forma de caja de pizza, que le abres y tiene un teclado, una pantalla y un ratón.

El ordenador puede ser Windows 98, Windows XP, Windows Vista o Linux.

También hay programas para bajarse música u otras cosas de Internet, como el Torrent, el Elephant…

Hay programas como el iTunes que te permite escuchar música.

En un ordenador también puedes meter juegos o escribir libros.

Me gusta mucho el ordenador, pero no me dejan tenerle.

(Ya apunta maneras de informático… o de empleado de Media Markt)

Parte II

El País de Mariquilandia

El día Uno de Enero del Dosmilcuarenta, en Mariquilandia (un país cercano a Plutón) sucedió algo muy extraño. ¡Hacía un calor tremendo!

Y eso que estamos a 1399 trillones de kilómetros de distancia al Sol.

Los solímetros marcaban 250 grados de temperatura.

Entonces se levantó un viento. ¡Era Stowandermaiden, el Jefe de Plutón y de Mariquilandia! A continuación se fue a su palacio.

Por la tarde, sin que nadi se diese cuenta, raptó a Nico, un niño de Mariquilandia.

Y se lo llevó en su gran nave a Plutón; allí estaba todo su ejército de marcianos.

Finalmente, llegó el ejército de Mariquilandia y liberaron a Nico.

Luego en casa de Nico, ¡fiesta!.

(Confieso… culpa mía por instruirle demasiado en la «cultura Star Wars«… )

Parte III

Rocío

Rocío se cree la más lista, pero sin embargo es la más tonta que yo he conocido.

Siempre está tocando las narices.

Y no habla sino que berrea.

Nota: es más pesada que un bebé llorando.

(Aclaración: según informes e investigaciones mías, la niña existe)